En los últimos dos partidos se han notado las significativas diferencias de nivel que hay entre los equipos que nos encontramos en la 3ª división de la categoría infantil femenina.
En el
partido contra Cambre en el que acabamos 12-59, uno de nuestros
objetivos era que no nos cerrasen marcador. Se jugó un partido con
muchas bajas, sobretodo en la posición de base y/o escolta y eso
complicó por momentos el subir el balón con fluidez, a pesar de ello
hubo un gran esfuerzo por parte de las nuestras y queda en nuestra
memoria una canasta que metimos en el último segundo y que tanto la
grada como el banquillo celebraron como si se hubiese ganado el
partido.
Por otro lado en el encuentro contra
Compañía María B salió un partido raro. Nuestro juego fue un tanto
obtuso por momentos. La defensa no estaba del todo fina, sobretodo en lo
que respecta al rebote, y el ataque a pesar de que llegaba en numerosas
ocasiones fallaba canastas de relativa facilidad.
Llegamos
al descanso con un 10 - 6 en contra. Sin embargo las Rosaleras
reaccionaron y decidieron ir a por el partido con garra e intensidad,
decidieron intentar ir más hacia canasta, aprovechar más los unos contra
uno y poco a poco se fue decantando el partido a nuestro favor. Además
creo que interiorizaron mejor que nunca la importancia del contacto
físico para sacar faltas al equipo rival ya que sin ser un partido
agresivo conseguimos que nos pitasen 15 faltas a favor. 
El
partido acabó con un resultado de 18 a 23. Creemos que justa victoria,
aunque los resultados en algunas ocasiones parecen más de balonmano que
de baloncesto. Cuesta ir hacia canasta, mirar aro y creerse que podemos
ganar un uno contra uno. Por lo demás sigo pensando que el equipo sigue
mejorando, aunque parezca un poco estancado en los últimos partidos, sin
embargo en los entrenamientos cada vez salen más cosas que hace unos
meses nos costaba visualizar.
Crónica Noel Miguelez
Fotos grupo de padres.
Fotos grupo de padres.
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